La Villa Balat es una casa de huéspedes excepcional con 3 habitaciones situada frente al mar en Namur, Bélgica. Si le gustan las casas auténticas con alma, caerá literalmente rendido ante el encanto del lugar. Las críticas en línea son unánimes. Vea este vídeo en Youtube para una visita guiada.

Mencione Let's Go My Love al hacer la reserva en el sitio web oficial y recibirá un regalo sorpresa. También puedes decir que vienes de nuestra parte cuando llegues. Visitamos la casa en enero de 2023 y pasamos muchas horas hablando con Muriel, la propietaria.

Situada junto al agua, la villa es una maravilla arquitectónica construida en 1906. El lugar está reservado exclusivamente a parejas que no vayan acompañadas de niños ni animales domésticos para garantizar la paz y la tranquilidad. Si llega al atardecer, el ambiente exterior es mágico. Muriel y Bernard le darán la bienvenida.

La decoración interior es cuidada y muy refinada, con telas finas, objetos insólitos encontrados, cuadros raros, varitas de incienso y el tipo de cosas que a uno le gusta encontrar en una casa. Hay 3 habitaciones, cada una con el nombre de una personalidad belga del siglo XIX: Anna Boch, pintora impresionista, Félicien Rops, pintor y dibujante, y Alphonse Balat, arquitecto favorito de Leopoldo II.

Las 3 habitaciones son preciosas, pero cada una tiene su propio estilo. Según su elección, disfrutará de las siguientes comodidades: ropa de cama de alta gama de Hastens (una de las mejores marcas de ropa de cama) con sábanas de lino belga, cuarto de baño privado, ducha de cerámica italiana o bañera en isla, productos de bienvenida de Nez Zen y Savonneries Bruxelloises, TV de pantalla plana, terraza privada y un magnífico techo acristalado.

En el exterior, pasee tranquilamente por el romántico jardín en mal estado, con sus numerosas variedades de flores y su fuente del siglo XIX. Es como estar en otra época...

Por la mañana, el desayuno se sirve entre las 8 y las 10 en el majestuoso comedor, con su crepitante chimenea y vistas al río. Estás tan cerca del agua que te sientes como en un barco. En el menú: pan, bollería, mermeladas caseras, zumo de fresa del Museo de la Fresa, quesos locales, embutidos, huevos frescos del huerto, macedonia de frutas y mermeladas caseras. La elección es real y está deliciosa.

La villa está situada en un lugar excepcional: entre el puente de Jambes y el puente de las Ardenas, con vistas directas al parlamento valón y a la ciudadela. El centro histórico está a poca distancia. Puede aparcar su coche en las calles Mazy y Champêtre. No se pierda el teleférico que conecta el centro de la ciudad y la cima de la ciudadela.